Los nootrópicos son suplementos alimenticios que potencian el rendimiento intelectual, mejorando la memoria, inteligencia, agilidad mental, atención y creatividad [1].
Aunque el nootrópico por excelencia es el café, aceites esenciales como la pimienta negra, el romero y la infusión Slique contienen moléculas que también tienen estos efectos.
El término «nootrópico» fue acuñado por el psicólogo y químico Corneliu Giurgea en 1972, quien definió estándares precisos para los nootrópicos [2]:
Mejora del aprendizaje: Un nootrópico debe ayudar a mejorar la memoria y el aprendizaje.
Mejora de la cognición bajo estrés: Un nootrópico debe lograr mejorar la función cerebral en condiciones adversas, como un bajo nivel de oxígeno.
Mayor resistencia a las agresiones cerebrales: Un nootrópico debe proteger al cerebro de la toxicidad química o física.
Actividad biológica demostrada: Un nootrópico debe mostrar un aumento real de la bioactividad, en lugar de un efecto placebo.
Facilitación de la transferencia de información: Un nootrópico debe ayudar a que la información fluya mejor a través del cerebro.
Ausencia de los efectos de los fármacos neuropsicotrópicos: Un nootrópico no debe ser tóxico para los seres humanos y no debe tener efectos secundarios significativos.
Es una lista de requerimientos muy específica y muy pocos de los llamados nootrópicos lo son realmente. Entender esta parte de la pimienta negra, el romero y la infusión Slique [3] nos ayuda a dejar a un lado el piloto automático y a ser más conscientes de cómo calmarnos emocional y mentalmente.
Puedes consultar las fuentes aquí:
[1] Nootrópicos: ¿qué son y cómo potencian tu inteligencia?
[2] Neurociencia Nutricional (en inglés)
[3] La infusión Slique contiene L-Teanina, considerada un nootrópico.