Cada día nos cuidamos más. Cuidamos lo que comemos, bebemos, a dónde vamos y lo que hacemos. Somos más conscientes de todo lo que nos rodea. Creamos una rutina diaria de bienestar que nos ayuda a sentirnos mejor a nivel físico, mental y espiritual.

Hoy en día la palabra bienestar está tomando una gran relevancia dentro de nuestra rutina diaria. Estamos tan sumergidos en clichés sobre todo lo que se supone nos hace sentir bien  que perdemos de vista lo que nos hace sentir bien.

A mi cada mañana lo que más me gusta es tomarme un café. Yo lo disfruto y es mi forma de ponerme en marcha. Es todo un placer desde que lo pongo en la cafetera hasta cuando me lo tomo. Me divierte mucho agregarle cada día diferentes aceites esenciales para ir probando los diferentes sabores que resultan de cada combinación.

Cuando algo te hace sentir bien da igual el estereotipo que se haya creado alrededor, porque nadie sabe mejor que tu lo que te da bienestar. Los conceptos sobre dietas y alimentos sanos son menos relevantes en este caso porque lo que se genera en tu interior es mucho más real y te prepara de forma positiva para comenzar tu día.

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