El aceite esencial de Bergamota se puede utilizar como una forma relativamente simple de reducción del estrés, que podría ser útil en nuestra sociedad moderna plagada de estrés crónico.
Así de contundente termina el estudio llevado a cabo por un equipo de investigadores de la Universidad de Medicina de la Prefectura de Kyoto, Japón y liderado por el profesor del Departamento de Inmunología Eri Watanabe.
En el estudio utilizaron el aceite de Bergamota –que se utiliza normalmente contra el estrés psicológico y la ansiedad– en un difusor y se trata de las primeras evidencias clínicas de estos efectos en seres humanos y cuyos resultados, según el estudio, demuestran que este aceite inhalado junto con vapor de agua (en un difusor) ejerce efectos psicológicos y fisiológicos en un tiempo relativamente corto.
En los grupos estudiados se observó un aumento la frecuencia cardíaca de alta frecuencia y una disminución de la presencia de cortisol en saliva, dos indicadores claros para medir el síndrome de la falta de adaptación, que conocemos todos con el nombre de estrés.
Puedes bajarte el estudio siguiendo este enlace.